19 Julio de 1993, 15ª etapa del Tour, Indurain de amarillo salía aquel dia de Perpignan para recorrer 231,5 km y 5 puertos de montaña, entre ellos el Port d´Envalira 2407m y el mítico Coll de Pal a 1.807m de altitud. Ese era el reto que me propuse junto a un amigo muy especial de mi infancia. Subir el último puerto de montaña de la etapa reina del Tour de aquel año, un puerto catalogado como de Categoría Especial. Nosotros ahí arriba unas horas antes que el pelotón, la ilusión frente a la élite del profesionalismo.
Aquella mañana salimos desde Andorra La Vella aproximadamente al medio día, subimos hasta La Massana con la cabeza, controlando nuestros desarrollos y dosificando nuestras fuerzas, la idea era llegar hasta Erts, justo a pie del puerto lo más entero posible sin embargo la altitud nos ahogó, la respiración era desacompasada, estábamos empapamos de sudor. Encaramos el puerto y empezó una odisea contra el asfalto digno de lo que sucedería unas horas más tarde allí mismo, nos levantamos del sillín, balanceamos las bicis y colocamos el piñón más grande, ahora solo dependíamos de nuestras piernas, subimos casi clavados por una carretera llena de fans del Tour con su asfalto pintado totalmente, cruzamos el pueblo Pals y llegamos a los pies de la estación exhaustos pero convertidos en unos héroes anónimos. Habíamos escalado un puerto del Tour!!!!
Minutos más tarde llego Indurain, Bugno y Rominguer, subieron en unos minutos hacia la cima, gano Oliverio Rincón pero esos no era importante.
Todavía hoy mi amigo especial y yo nos acordamos de nuestra gesta anónima.
Ayer nos llamamos: Hola Rachi, Hola Pablo, el Tour ha llegado a Barcelona, pero te acuerdas de aquel día, claro que sí fue increíble.
El Tour hoy también llegará a Andorra pero hoy lo hace desde Barcelona, es nuestro pequeño homenaje.
Aquella mañana salimos desde Andorra La Vella aproximadamente al medio día, subimos hasta La Massana con la cabeza, controlando nuestros desarrollos y dosificando nuestras fuerzas, la idea era llegar hasta Erts, justo a pie del puerto lo más entero posible sin embargo la altitud nos ahogó, la respiración era desacompasada, estábamos empapamos de sudor. Encaramos el puerto y empezó una odisea contra el asfalto digno de lo que sucedería unas horas más tarde allí mismo, nos levantamos del sillín, balanceamos las bicis y colocamos el piñón más grande, ahora solo dependíamos de nuestras piernas, subimos casi clavados por una carretera llena de fans del Tour con su asfalto pintado totalmente, cruzamos el pueblo Pals y llegamos a los pies de la estación exhaustos pero convertidos en unos héroes anónimos. Habíamos escalado un puerto del Tour!!!!
Minutos más tarde llego Indurain, Bugno y Rominguer, subieron en unos minutos hacia la cima, gano Oliverio Rincón pero esos no era importante.
Todavía hoy mi amigo especial y yo nos acordamos de nuestra gesta anónima.
Ayer nos llamamos: Hola Rachi, Hola Pablo, el Tour ha llegado a Barcelona, pero te acuerdas de aquel día, claro que sí fue increíble.
El Tour hoy también llegará a Andorra pero hoy lo hace desde Barcelona, es nuestro pequeño homenaje.