Quim, desde la misma arena de Gavà lloré cuando me comunicaron que tu corazón volvía a latir, en ese momento decidí que competiría en el sprint, tú ya estabas en la arena, había pasado lo peor. En ese momento respiré tranquilo, lo habíamos conseguido, el aviso de los triatletas encendió la alarma en los voluntarios de tierra.
Salí en estado de shock, muy nervioso, desde la última fila del corral, hacia 2 años de mi primer triatlón y durante el entrenamiento de 8 semanas mi prioridad fue el ciclismo, más nervios. Nadar con Neopreno me agobiaba un poco más. Suena la sirena, veo a Rachi y me lanzo al mar en última posición. Golpes, manotazos, imposible nadar, empiezo a recuperar posiciones pero es muy complicado, literalmente nado por encima de triatletas, hasta que me acerco a la primera boya, allí mi nerviosismo aumenta exageradamente, el neopreno me oprime y mis pulmones necesitan todo el aire, miro la canoa a unos 10 metros y me tranquilizo, nado braza, me oriento de nuevo en busca de la segunda boya y nado crol con tranquilidad. Supero la segunda boya y levanto la cabeza para visualizar de nuevo la playa, son los últimos 300m que se me hacen larguísimos, por fin piso la arena, levanto la mirada y veo a Pablo y a Rachi, ahora me tranquilizo, a partir de este momento empiezo disfrutar del tri. Salgo del agua el 201 de 198, la natación ha sido complicada.
La transición es la larguísima y encima mi neopreno se empeña en dar una vuelta en bici, me cuesta una barbaridad desprenderme de él, fallo de novato ya que no había entrenado la T1, por fin subo en la De Rosa y en la Avenida del Mar choco las manos con Pablo, Vamos Papi!!!! Vuelo, me levanto del sillín y busco un grupo de mi nivel en dirección a la Sentiu. Me adelanta Rubens, del DreamTeam corredors.cat y cojo su rueda, al lado 2 triatletas se unen y formamos un grupo, llegamos a Gavà centro y allí decido incrementar el ritmo y ponerme delante del grupo, la subida a la Sentiu me obliga a colocar el 39/19 incluso llego a colocar el 21, coronamos la subida y vuelo hasta la autopista de nuevo, ahora sí lo coloco todo 52/12 y aprieto los dientes, prefiero no rodar en grupo arriesgando todo mi potencial, en Gavà Mar de nuevo Rachi y Pablo me animan, es mi mejor momento, adelanto a un tri casi en boxes y entro a saco en la T2, larguísima, pierdo una minutada. Mi tiempo en este segmento incluyendo la T1 y T2 es de 44’51’’ el 166.
Corro, -Vamos papi!!!-, grita Pablo; es mi deporte, le lanzo el bidón TREK como signo de complicidad, hace un calor terrible, pero como siempre después de más de una hora de esfuerzo sin ningún impacto corro lentísimo, a 5’/Km, el recorrido es fantástico, un circuito ida y vuelta de 2,5Km aproximadamente me permite disfrutar viendo a todos los triatletas, compartir gritos de ánimo, saludos entre los correcats: Hansi, Rubens, stone, dragan… son un revulsivo, sin embargo el incremento de velocidad es escaso, recta de meta pasado el K5, carrera muy larga, veo a Rachi y a Pablo de nuevo, finisher en 1h29’52’’, la carrera desde la T2 en 26’31’’ el 260
En meta me entero de lo sucedido, 750 lágrimas + 20 latidos + 5 abrazos a la eternidad.